La representación del dolor en el parto en obras de ficción o documentales (e incluso en el relato de varias madres), muestra la mayoría de las veces la idea de un dolor enorme. Por eso, toda mujer que desea ser madre, espera un gran dolor durante el parto y eso puede incluso elevar sus niveles de ansiedad en el embarazo. De acuerdo con la Revista de la Asociación Médica Brasileña, este dolor puede incluso ser una necesidad para la mujer, para que pueda sentirse madre.

En la concepción católica, el dolor en el parto está vinculado al libro del Génesis, donde el dolor debe ser un castigo que la mujer debe sentir, debido a la desobediencia de Eva en el Jardín del Edén. “Multiplicaré en gran manera tu dolor y tu concepción; con dolor darás a luz hijos…” (Génesis 3:16).

De esta forma, la experiencia del parto puede ser negativa dependiendo de cómo la mujer está manejando todo el proceso del dolor. Afortunadamente, existen formas de lograr un parto sin dolor o, dependiendo de la sensibilidad de la mujer, un parto con dolores reducidos. ¡Consulta algunas formas que destacamos a continuación y una entrevista que hicimos con el obstetra sobre el tema!

¿Qué es el dolor del parto?

De acuerdo con el obstetra británico Grantly Dick-Read (1933), el dolor en el parto es causado por la tríada “Miedo – Tensión – Dolor”. Debido a las influencias que la mujer puede sufrir por las supersticiones, la cultura o la civilización, esto puede contribuir a generar miedo y angustia en la mujer, relacionados con el parto.

El miedo causa una reacción de tensión protectora, que no es solo mental, sino también una tensión muscular. Cuando la gestante entra en trabajo de parto y está tensa, el cuello del útero tiene dificultades para dilatarse para la salida natural del niño, causando el dolor. Además, cuando la mujer está en situaciones de dolor, junto con el miedo y la tensión, lo interpreta como una situación de peligro, y esto puede intensificar su miedo y su tensión, generando un círculo vicioso.

Un ejemplo de esto es la gestante que puede haber recibido información preocupante de los familiares sobre las cuestiones del parto y comienza a tener miedo antes incluso de que llegue este momento. Este miedo la deja tensa en el momento del parto, y esto dificulta su musculatura para que el niño pueda nacer. Su cuerpo se vuelve resistente a los movimientos naturales, lo que termina causando más dolor y afectando su salud mental, intensificando el miedo y, consecuentemente, la tensión y el dolor.

Las formas de tener un parto sin dolor

El conocimiento y el interés para elaborar un parto sin dolor existen desde 1888. De acuerdo con la Enciclopedia Digital de Historia Europea, ya había estudios en la URSS sobre cómo ejercer influencias psicológicas para reducir el dolor en el parto y que fueron importados a Francia posteriormente.

Metodologías del pasado

En 1902, Nicolaiev en Rusia – Realizó el primer trabajo específico y publicado utilizando la hipnosis para reducir el dolor en el momento del parto. Era algo común para la época por ser una medida eficiente y sin costos adicionales de medicamentos anestésicos que eran caros.

Así, los avances continuaron en estudios en el área de la psicología y la obstetricia, y comenzaron a surgir nuevas formas naturales de inhibición del dolor, enfocadas en técnicas diversas y acompañamientos estratégicos.

Ya en 1947, se creó el método Brandley, y luego después en 1951 la Técnica Lamaze. Ambas tenían el enfoque en técnicas de relajación, nutrición y ofrecían diferentes tipos de soporte para la mujer para disminuir su tensión y miedo.

Metodología Hypno Pregnancy

Hoy, existe un método creado a partir de las mejores prácticas científicamente comprobadas que se han desarrollado hasta ahora, es el HypnoPregnancy® de la SBH, que cuenta con metodologías que pueden ser aplicadas por cualquier profesional de la salud o por los acompañantes. 

Por medio de esta metodología, en el momento del parto la hipnosis entra como una forma de ayudar a las mujeres a pasar por un parto normal tranquilo y cómodo, muchas veces sin dolores, ya que serán condicionadas a entrar en un estado de relajación profundo, inhibiendo miedos y tensiones, que son factores que pueden influir en el dolor de la mujer. Estos efectos pueden ser durante y antes del parto, si un acompañante o un profesional de salud bien preparado, está apto para aplicar las técnicas correctamente. 

Específicamente sobre la Hipnosis, ya está ganando destaque en los medios. Según la American Psychological Association (APA), con pequeñas consideraciones de la Sociedad Brasileña de Hipnosis (SBH), la hipnosis puede ser definida como un estado de conciencia [inducido intencionalmente] que involucra atención concentrada y conciencia periférica reducida, caracterizado por una mayor capacidad de respuesta a la sugestión. 

En este estado, el sujeto es conducido a experimentar cambios en las sensaciones, percepciones, pensamientos o comportamiento [orientado a un objetivo].

Según una publicación de la USP, la preparación para la hipnosis tiene relación directa con el ambiente, con las palabras de incentivo que son inducidas para la gestante y la posición para la efectividad del parto. Utilizar la hipnosis antes del parto, es útil para establecer un escenario más tranquilo y cómodo, controlar posibles crisis de ansiedad inesperadas, ayudar de una forma general en la preparación de la gestante para el momento del parto. 

Evidencias científicas

Ciertamente, el campo con más evidencias a favor del uso de la hipnosis es el de control del dolor. En 2019¹, se realizó una revisión sistemática y meta-análisis involucrando 85 estudios aleatorizados y controlados cuyo objetivo era observar la eficacia de la hipnosis para el alivio del dolor.

Estos hallazgos de todos estos 85 artículos sugieren que la intervención hipnótica puede proporcionar alivio significativo del dolor para la mayoría de las personas y, por lo tanto, puede ser una alternativa eficaz y segura a la intervención farmacéutica.

También existen algunos estudios que evidencian científicamente la eficiencia de la hipnosis para los problemas relacionados con el embarazo.

De acuerdo con National Library of Medicine, hay un estudio conocido como “La Eficacia de la Intervención de Hipnosis en Aliviar los Síntomas Psicológicos Postparto”, que muestra que las mujeres que recibieron tratamientos por medio de la hipnosis, tuvieron menos posibilidades de desarrollar una depresión postparto.

Si miramos un caso publicado por la American Journal of Clinical Hypnosis, la hipnosis como medio clínico para el tratamiento de la depresión postparto funcionó para una mujer de 27 años que sufría con la enfermedad. Tras su resistencia con medicaciones antidepresivas, permitió el uso de la hipnosis como tratamiento y desde la primera sesión ya comenzó a tener resultados satisfactorios  hasta la cura de la enfermedad.

Entrevista con el Obstetra Cristiano Salazar

Aprovechamos la oportunidad para entrevistar a uno de los alumnos del Curso de HypnoPregnancy, para mostrarte la opinión de un profesional de la salud sobre la relación de la hipnosis con los dolores en el parto.

¿Cuál es el potencial de la hipnosis para su área?

La idea de utilizar la hipnosis para reducir el dolor en el parto es siempre muy atractiva. Siempre tenemos relatos de éxito del empleo de la técnica, y de la satisfacción de las parturientas que son afines a este enfoque.

Sin embargo, las investigaciones científicas en su conjunto no logran, hasta el momento, establecer definitivamente el beneficio de la hipnosis cuando se compara con otras técnicas farmacológicas y no farmacológicas – excepto por una reducción en la necesidad de analgesia.

En mi percepción, el principal potencial de la hipnosis en el embarazo, parto y puerperio es ayudar a la mujer a tener la mejor experiencia posible. Hay innumerables inseguridades (con la salud del bebé, con el dolor del nacimiento, con la propia capacidad de ejercer la maternidad), transformaciones, exigencias y movilizaciones de sentimientos que pueden impedir a la mujer vivir con felicidad este momento de la vida  – justamente un momento tan especial, pleno, transformador, empoderador.

La hipnosis, si se utiliza adecuadamente, con certeza es una herramienta que puede ayudar a la mujer a reducir la ansiedad, alinear las expectativas para reducir frustraciones, anclarse a sensaciones de bienestar, seguridad y coraje, proyectar un resultado feliz y un vínculo adecuado con el bebé.

El objetivo es que el embarazo resulte en una madre saludable, un bebé saludable y un buen recuerdo. Es justamente dando herramientas para que este buen recuerdo exista que el hipnólogo tiene siempre que contribuir durante el embarazo.

Cuando la gestante está en un embarazo de riesgo grave, ¿se recomienda el uso de la hipnoterapia?

Es difícil hablar de recomendación, pues hay muy pocas investigaciones científicas sobre hipnosis en embarazos de alto riesgo. Por ejemplo, ya se ha estudiado el efecto de la hipnosis en la reducción de la presión en embarazadas hipertensas – pero los resultados no fueron concluyentes. Además, hay un número de patologías diferentes que hacen grave un embarazo, siendo difícil establecer líneas generales.

Sin embargo, la hipnosis – cuando es aplicada por un profesional experimentado y cuidadoso – no presenta efectos adversos significativos, siendo una herramienta de gran potencial para el relajamiento, reducción de ansiedad y para la preparación de la gestante con relación a los desafíos que están por venir. Y las gestantes de alto riesgo enfrentan muchos desafíos.

Insisto en la cuestión del cuidado y experiencia, pues siempre estamos tratando de un binomio muy delicado, que exige del profesional una gran responsabilidad. Aunque varias técnicas de hipnosis pueden ser empleadas a lo largo del embarazo y del parto, la mayoría concuerda en que no es exactamente el mejor momento para hacer hipnoterapia y tratar cuestiones más profundas.

El profesional necesita tener seguridad de que la época del embarazo y el estado de salud de la madre permiten el llanto, la emoción, las eventuales contracciones, la vasodilatación, las modificaciones de respiración y presión que pueden ocurrir durante el empleo de las técnicas.

¿Cuáles son los factores que influyen en los dolores del parto? ¿Cómo pueden ser neutralizados?

La sensación del dolor es siempre el resultado de la interacción entre el estímulo físico y la percepción sensorial. El estímulo físico es eminentemente biológico, relacionado con la fuerza de las contracciones, el posicionamiento, la anatomía, la fisiología y todo aquello que el profesional de salud que asiste el parto puede interferir en la fisiología (con medicamentos, anestesia, fisioterapia, etc.). Pero la percepción sensorial de la parturienta está totalmente influenciada por el miedo y la tensión, donde el hipnólogo tiene mucho espacio para actuar.

Podemos reducir el miedo a través de la psicoeducación, dotando a la gestante de información correcta sobre cómo todo el proceso puede ocurrir, además de trabajar previamente las ansiedades y expectativas – toda la preparación previa aumenta el éxito.

Y las tensiones (neuromuscular, neurovegetativa y neuropsíquica/emocional) que, según Osmar Colás, son elementos que se retroalimentan y potencian, pueden ser reducidas con técnicas de relajación, técnicas de respiración y técnicas contemplativas. El hipnólogo tiene que conocer y emplear sus herramientas para la reducción del sufrimiento, que es el verdadero objetivo de cualquier método no farmacológico para alivio del dolor.

Por lo tanto, como ya existen desde hace algunos años metodologías para tener un parto sin dolor, es necesario que la gestante busque el asesoramiento con su médico, sobre cuál sería la forma más ideal para su caso.

Si estás buscando un terapeuta especialista en hipnosis clínica, pregunta sobre sus cualificaciones, y si forma parte de alguna institución que proporciona orientación ética, como la Sociedad Brasileña de Hipnosis. 

Para saber con más detalles sobre la hipnosis en el embarazo, entonces necesitas descargar nuestro e-book gratuito sobre HypnoPregancy & ChildBirth.

1. Thompson T, Terhune DB, Oram C, Sharangparni J, Rouf R, Solmi M, Veronese N, Stubbs B. The effectiveness of hypnosis for pain relief: A systematic review and meta-analysis of 85 controlled experimental trials. Neurosci Biobehav Rev. 2019 Apr;99:298-310. doi: 10.1016/j.neubiorev.2019.02.013. Epub 2019 Feb 18. PMID: 30790634.

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